¿Es saludable la comida rápida?

 Consejos y tips

La comida rápida o fast food es barata, cómoda, saciante, y para la mayoría de las personas sabe bien.

Desafortunadamente, comer tan sólo una vez comida rápida nos puede hacer ingerir las calorías, sodio y grasas recomendadas para un día entero y fastidiar nuestra dieta para bajar de peso.

Comida rápida: Comer comida rápida regularmente nos puede conducir a una serie de problemas de salud diferentes. Sin embargo, es muy difícil resistirse a la tentación de la comida rápida y barata. No obstante, si estamos bien informados, podemos tomar elecciones más saludables y disfrutar de la comodidad y los precios de los restaurantes de comida rápida.

Cuando es saludable comer comida rápida

La respuesta fácil es: en muy pocas ocasiones. Por lo general, la comida rápida es baja es nutrición y alta en grasas saturadas, sodio y calorías.

Por ejemplo: una hamburguesa doble con queso, patatas fritas medianas y una tarta de manzana de un reconocido Burger, contiene más grasas saturadas de las que se recomienda comer en dos días. La moderación se convierte en la clave. Está bien disfrutar de un antojo de patatas fritas de vez en cuando, pero para mantener una buena salud no podemos convertirlo en un hábito regular. Encontrar una comida sana y equilibrada en la mayoría de los restaurantes de comida rápida puede ser todo un reto, pero siempre hay opciones que se pueden tomar que son más saludables que otras. Aprender a tomar decisiones saludables en los restaurantes de comida rápida

Tomar las decisiones más saludables en los restaurantes de comida rápida es más sencillo si nos preparamos antes consultando guías que muestren el valor nutricional de las diversas opciones de comida rápida de nuestros restaurantes favoritos.

Si debemos tener alguna preocupación especial con nuestra dieta, por tener diabetes, problemas del corazón o querer bajar de peso, podemos encontrar consejo en sitios web de organizaciones no lucrativas. También podemos optar por restaurantes que se centren en alimentos naturales y de alta calidad.

Si no nos preparamos con antelación, nuestro sentido común puede ayudar a hacer que nuestras comidas sean más saludables. Por ejemplo, una ensalada aparentemente sana, puede ser en realidad una bomba para nuestra dieta si la aderezamos con ingredientes fritos y de alto contenido en grasa. Así que es mejor escoger una ensalada cubierta con alimentos a la plancha y aderezo ligero. El control de las cantidades es también muy importante, ya que muchos restaurantes de comida rápida sirven cantidades suficientes para cubrir diferentes comidas con la apariencia de una sola ración.

Consejos

En los restaurantes de comida rápida hacer selecciones de menú cuidadosas: prestar atención a las descripciones en el menú.

Beber agua en lugar de bebidas carbonatadas.

“Desnudar” nuestra comida.

Solicitar nuestra comida sin aderezo, para posteriormente aderezarla nosotros mismos.

Hacer pedidos especiales. Al pedir la comida, solicitar que eliminen de ella la parte que no nos interese por su alto contenido calórico o en grasas.

Comer con atención plena. Debemos prestar atención a lo que comemos y saborear cada bocado. Debemos masticar bien los alimentos y evitar comer a la carrera; así como dejar de comer en cuanto nos sintamos saciados.

Debemos Evitar

Raciones extra grandes. Una comida promedio de fast food pude llevar 1000 calorías o más. Así que debemos elegir el tamaño más pequeño y pedir ensalada en lugar de patatas fritas.

También es buena idea compartir la comida con un acompañante.

La Sal: La comida rápida suele ser muy alta en sodio, un importante contribuyente a la hipertensión arterial. No debemos agregar más sal a las comidas.

Buffets: Incluso los aparentemente saludables como los de ensaladas. Es muy probable que comamos en exceso por amortizar el dinero.

Bacon: Siempre es tentador añadirlo en nuestras comidas para darle más sabor, pero tiene muy pocos nutrientes y es alto en grasas y calorías.